George Lucas prepara dos películas que no podrás ver

Nada de lo que George Lucas tenía pensado para un hipotético Episodio VII de Star Wars ha acabado en El despertar de la Fuerza de J.J. Abrams, según ha confirmado el propio creador de la saga galáctica a USA Today. "Disney tomó la decisión de no utilizar ninguna de las ideas que les vendí", confiesa el director sin que se perciba ni una pizca de lamento. Lo cierto es que Lucas parece tener más que superada la marcha del universo Star Wars  y su cabeza está en otras cosas. Por ejemplo, en ver qué tal le va al musical de animación Strange Magic que ha producido y llega esta semana a los cines de EE UU. Pero también en nuevos proyectos cinematográficos muy personales. En otra entrevista, esta vez para Hero Complex, afirma que está trabajando en dos nuevas películas, aunque es muy poco probable que acabemos viéndolas.

Lucas está escribiendo dos largometrajes experimentales en la estela de sus cortos y prácticas cuando era un estudiante de la Universidad del Sur de California. Eso sí, el cineasta de 70 años no tiene intención de estrenarlos una vez que los realice. "Por la forma en la que están concebidas no son películas que puedan estrenarse. Son básicamente para mí mismo y quizás se las enseñe a algunos amigos", comenta el director. "Costaría más distribuirlas y enseñarlas que hacerlas. Son películas que nunca van a ganar dinero ni nada así".

Nos creemos sin duda que la distribución cinematográfica actual no le pone muy buenos ojos a propuestas que se salgan de algún modo de la norma narrativa convencional, pero también sabemos que hay multitud de posibilidades (el VOD una de ellas) que Lucas podría tantear en el caso de querer enseñar sus próximos filmes al público. Pero no parece que el cineasta esté muy por la labor de compartir mucha más información sobre unos proyectos que, a decir verdad, puede que todavía esté terminando de plantear.

"Son parecidas a las cosas que hice cuando estudiaba o películas que he producido, como Koyaanisqatsi o Powaqqatsi [ambas de Godfrey Reggio]", es lo único que suelta. "Pero son diferentes, porque se trata de películas dramáticas. Es muy difícil de explicar porque es algo que no se ha hecho nunca antes". Y que a no ser que nos disfracemos de Steven Spielberg para colarnos en una proyección en el Rancho Skywalker puede que nunca lleguemos a ver.